Salmo Trutta, el sueño de muchos.

Por J. P. García, R. Martín y Tornillo.

Hay sin dudas en ellas algo especial. Difíciles, esquivas, impredecibles, agresivas, enormes, astutas... En esta nota, tres autores abordan la descripción del mundo de las marrones grandes desde distintos enfoques: Técnicas de pesca, moscas, características de la especie, ámbientes, mística y consejos. Como para darse el gusto de ir al río con un poco más de ganas e intentar "la trucha de nuestras vidas".

     Marrones de más de 3 ó 4 kilos. De 6 ó 7. Y, por que no, de más de 10. El sueño de muchos que se inician en la mosca, y la satisfacción de tantos otros que han llegado a un grado de experiencia tal que se permiten hasta presentir su brutal pique en medio de una corredera...

Capítulo 1.

Marrones en Correderas.

     Si consensuamos entre los pescadores de salmónidos de nuestro país, es probable que nos encontremos con que el salmónido más hermoso es la Trucha de Arroyo (Salvelinus Fontinalis), el más peleador y veloz es el Salmón Encerrado (Salmo Salar Sebago), y que el más popular es la Trucha Arco Iris (Oncorynchus Mykiss). Con estas descripciones parece que hemos cubierto todos los atributos y cualidades que un pescador requiere de su presa en sólo tres salmónidos.

     Entonces... ¿cuál es el atributo de la Trucha Marrón (Salmo Trutta) que nos hace soñar con su captura?. No es un sólo atributo, sino varios... Es la más astuta, la más agresiva, la que alcanza mayores portes y es casi impredecible. Capaz de ignorarnos una y otra vez, aún teniendo la certeza de que se encuentra allí, y que experiencias anteriores nos indican que estamos haciendo las cosas bien.

     Vamos entonces a analizar una serie de elementos que, combinados, pueden darnos mayores chances. Por supuesto, no deben tomarse como "las únicas y verdaderas" formas de pescar marrones grandes; pero sí como un pequeño compendio de sugerencias basadas en la experiencia y que en el río han demostrado resultados.

     Tras ellas.

     Antes de continuar, vamoa a definir qué es para nosotros una Marrón grande. Digamos que de tres kilos ó 65/70 centímetros para arriba, el pescado merece la categoría de "grande" para los tiempos que corren. También los parámetros pueden variar según el estado sanitario del pez, porque puede ser corta pero muy robusta o larga y escuálida. Pero en proporciones normales, las medidas mencionadas son las de una gran trucha.

     Por supuesto que el ambiente en el que se la captura relativiza lo expresado: Una Marrón de 1,5 kilos es "chica" en la Boca, es "normal" en muchos lugares y "grande" en un arroyito. de 6 ó 7 kilos para arriba tenemos la categoría "cocodrilo" sin importar el ambiente.

     Ahora vamos a mencionar una pequeña lista de ambientes neuquinos en los que las chances de capturar una Marrón Grande aumentan considerablemente respecto de otros. Siempre dejando claro que a fin de temporada y por el carácter marcadamente migratorio de la especie, podemos encontrar una marrón grande en casi todos los ríos.

     Sin ánimo de sugerir que el sólo hecho de visitarnos garantice el pique de uno de estos aparatos, podemos enumerar los siguientes lugares: Boca del Limay, Limay Superior y Limay Medio durante toda la temporada. Boca del Chimehuín y Río Chimehuín. Muy buena chances en la extensión de temporada sobre Junín de los Andes. Collón Curá a fin de temporada. Y finalmente, a pesar que esta nota está dirigida a la pesca en ríos, debemos mencionar que en casi todos nuestros lagos la posibilidad de una marronaza de aquellas está latente, sobre todo en los grandes lagos.

     Las Correderas.

     En plan de facilitarle las cosas a quien desee enfrentar a una de las grandes por primera vez, vamos a situar las técnicas de pesca en un sitio sencillo de ser pescado.

     Existen muchos accidentes geográficos en un río que sirven de refugio a las grandes marrones. Algunos de ellos se presentan más accesibles que otros para ubicar correctamente nuestra mosca. Pero tal vez el lugar que nos permita de manera más sencilla realizar una lectura adecuada y poner un streamer al alcance de su ataque sea la corredera.

     ¿Que es una corredera típica?. Vamos a intentar una definición: Una corredera es un sector del río en el que, si lo observamos a lo ancho, existe una notoria diferencia de velocidad en una parte de la corriente respecto a la/s otra/s, producto de la presencia de un desnivel abrupto, una curva, o un obstáculo que genera allí mayor profundidad y circulación de caudal.

     Eso más o menos es una corredera o "run". Podemos encontrarlas más lentas, más rápidas, con olas quietas o sin ellas, con aguas blancas o no, recostadas sobre una de las orillas o al medio del río, largas, cortas, más profundas, más bajas, como antesala o salida de un gran pozón o un flat o un pedrero, etc.. Pero todas, absolutamente todas se pescan con streamer de forma muy similar.

     Las mejores chances de encontrar marrones grandes las tendremos en aquellas correderas que sean profundas con corriente moderada.

     En los sectores laterales de la corredera, el agua puede formar lentas corrientes en círculo o correr a poca velocidad río abajo, pero habrá algo que no variará: allí habrá menos profundidad debido a que la corriente lenta no arrastra los sedimentos más pequeños (arena, pedregullo, etc.).

     Nuestra atención debe centrarse del límite entre la corriente rápida y la lenta (sector al que llamamos "costura") un poco hacia adentro, cerca de allí encontraremos corrientes intermedias en las que las truchas se ubican para gastar menos energía y además tener el sector de mayor circulación de agua (y de comida) a tiro de sus tarascones.

     Pero también en medio de la corredera hacia la cola de la misma (sector en el que comienza a perder un poco de velocidad) podemos encontrar las grandes marrones. Valiéndose de un obstáculo en el lecho del río como reparo, o la misma cercanía al fondo, ellas encontrarán corrientes intermedias para estar, sobre todo cuando buscan una posición para comer. Y este sector tiene un atractivo extra: el pique será brutal.

     La técnica básica de pesca y las variantes que describiremos, tienen por objetivo pescar en un sólo tiro ambos sectores mencionados, corredera y costura.

     Lanzamiento y Corrección.

     Infinidad de veces he visto pescadores lanzar su mosca a una corredera y recoger veloz o normalmente la línea apenas ésta toca el agua. No es esta la mejor técnica para hacer subir una marrón grande. Normalmente la mosca es tomada por las Arco Iris más pequeñas cuando el streamer culmina su deriva.

     Vamos a tener en cuenta cuatro objetivos para tener éxito: 1) Que nuestra mosca permanezca la mayor cantidad de tiempo posible dentro de la corredera. 2) Que profundice. 3) Que se mueva lentamente, pero con vida. 4) Que la línea no forme una panza haciendo pescar la mosca río abajo a gran velocidad, o sacándola de la corredera.

     Para lograr esto, debemos efectuar correcciones río arriba en la línea, que pueden ser realizadas de dos maneras: sin agregar línea al tiro, o agregándosela. Agregando línea lograremos, además de mantener la mosca adentro, hacerla profundizar (fotos A, B y C).

     Para quienes no saben lo que es corregir la línea vamos a explicarlo.

     Corregir una línea es simplemente reubicarla una vez que se posó en el agua con movimientos de la caña. Es decir, la línea cae de una manera y nosotros la movemos para que quede de otra. También existen las correcciones aéreas, que las realizamos mientras la línea "viaja" en el cast final, pero no nos compliquemos.

     Las correcciones (o "mends") pueden hacerse corriente arriba o corriente abajo. Las que a nosotros nos interesan y sirven en la situación de pesca que tratamos, son corriente arriba. Por supuesto que utilizando shootings de hundimiento rápido o las conocidas "Tenny" es imposible corregir casi toda la línea, y en la mayoría de los casos sólo corregimos la parte más cercana a nosotros (el running, o tanza especial para shootings que usemos). Para lograr una corrección eficaz, es importante que la línea se tense un poco por la corriente. De esta forma al levantar la caña para corregir levantaremos más metros de línea.

     Una vez corregida la línea, podemos seguir efectuando correcciones y agregándole línea al tiro para que la mosca baje, o bien frenarla y dejar que el streamer cruce la corriente pescando. Todo depende de la velocidad y profundidad del lugar. Y cabe aclarar que en esto, es muy importante la elección de la línea. En correderas profundas de ríos grandes, no conviene usar nada más liviano que "hundimiento 4 ó 5".

     A veces, y sobre todo cuando usamos tanza para shootings (Amnesia, Cobra, Pilon, etc.), para corregir la línea simplemente levantamos la caña y la mantenemos bien arriba. De esta manera evitamos que la parte trasera forme una panza mientras el shooting se acomoda y baja en la corriente. Una vez que la mosca se acomodó, bajamos la caña y pescamos el tiro. Como al corregir perdemos un poco de distancia, es bueno aclarar que en grandes correderas hay que castear bien lejos.

     No ignoro que la forma "correcta y aceptada" de presentar un streamer según varios libros y videos que he visto es mostrar el perfil de éste a la trucha y hacer que "corra" hacia el costado como tratando de huir. Pero ocurre que en una corredera de cierta velocidad esto a veces es posible lograrlo y a veces no. Porque en pos de conseguir nuestro objetivo de mantener la mosca adentro, ésta puede llegar a navegar enfrentando bastante la corriente. Y hasta es bueno que ocurra, porque los resultados obtenidos lo demuestran.

     Es importante tener en cuenta que la Marrón prefiere ubicarse en la parte inferior de la columna de agua, pegada al fondo, a diferencia de la Arco Iris que la utiliza completa. Es por ello que si no podemos pescar bien abajo, para que suba debemos presentársela como una presa fácil, que no se escapará a último momento. Una vez que logramos mantener el streamer adentro y abajo, viene la tarea de moverlo o no. Es decir, se lo acercamos lentamente y le damos vida. Tengamos en cuenta que el pez debe calcular que su presa se encuentra en dificultades para huir de allí, de esa forma se tentará a tomarla. Una forma de lograr esto es dar tirones nerviosos a la línea sin recoger. Algo así como: "¡Trata de huir, pero no puede!".

     Usted debe ir variando el movimiento de la mosca, porque el pez puede reaccionar frente a estímulos diversos según la actitud que tenga en ese momento. Un método que personalmente me ha dado buenos resultados es el siguiente: En el primer tiro, una vez que se ubicó la mosca, recojo con tirones suaves y espaciados que se aceleran al final. En el segundo utilizo los tirones nerviosos y sin recoger de manera constante. Y en el tercero dejo que la mosca cruce la corriente sin darle ningún tipo de movimiento extra. Recién entonces camino un par de pasos río abajo, tomo una nueva posición y repito el procedimiento. De esta forma "barremos" el sector con una oferta variada.

     Para terminar: Una Marrón grande no está entregada hasta que no la tomamos con nuestras manos y la levantamos. Mucho cuidado al arrimarla, es bueno no apurarse ni intentar vararla en las piedras. Acérquese despacio y tómela suavemente. Jamás apriete la línea con los dedos contra el mango de la caña, deje abierta la posibilidad de que pueda salir ante una corrida imprevista. No permita que otro pescador se acerque a agarrarla, porque si finalmente logra sacarla, la habrá pescado Ud., pero si se va, se le escapó al otro. He visto muchísimos aparatos que parecían entregados y que por la ansiedad del pescador se fueron. Sobre todo los he visto cortar mi propio líder. Suerte!. (E.C.)

Capítulo 2.

Moscas y Características.

     Venimos pescando río abajo con el agua a las rodillas, a lo largo de una extensa corriente, en un sector donde el río es recto y no presenta grandes accidentes a simple vista, su fondo de piedras es aparentemente constante y al parecer no posee buenos resguardos para que nuestra querida trucha se hospede aquí. Pero ya que estamos vamos a pasarlo con un par de tiros rápidos porque hay que llegar hasta "esa" curva y nos quedan escasos 30 minutos de luz.

     Hacemos el primer lance y nuestra Woolly Bugger negra en anzuelo N° 4 (mosca a la que le tenemos fé hasta en una palangana) cae cerca de la otra orilla. Ese viento que nos acompañó todo el día ocasiona que no toda la línea haya sido extendida sobre el agua y dejamos que la corriente lleve el sobrante de nuestro lado, en ese momento y con la vista en esa hermosa curva río abajo, comenzamos a recoger la línea y luego de unos segundos nos damos cuenta que nuestra mosca es retenida por algo debajo del agua.

     Al levantar la caña, la flexión de ésta, la tensión de la línea y cierta frecuencia de tirones nos hacen suponer que es un pez por el pique. Creemos que no debe ser muy grande, no salta, no da grandes corridas, pero es pesado y si no fuera por esos "tirones" diríamos que se trata de un tronco. Luego de unos 10 minutos, este pez comienza a nadar lentamente río arriba y sin que pudiéramos hacer nada comenzamos a recoger nuestra Woolly Bugger completamente sola. El nudo está bien, la mosca no muestra indicios de haber sido atacada, y si "eso" no hubiera nadado un poco río arriba apostábamos plata a que fue un enganche sobre el fondo, de alguna rama o tronco. Salimos lentamente del agua y retornamos al campamento porque ya no hay tiempo de pescar esa hermosa curva. Si tuviéramos un espejo en ese momento creo que no nos animaríamos a vernos la cara.

     Al llegar al campamento y contar lo sucedido a nuestros compañeros, comenzamos a escuchar historias de "truchas con manos o pinzas pico de loro".

     Lo que tuvimos ese día por unos instantes en el extremo de nuestra línea fue probablemente el mejor producto de una larga evolución como depredadores de la que son parte las truchas, tal vez el pez de agua dulce más perfecto, el más cauto, el más instintivo, el más difícil. Lo que tuvimos por un instante fue una gran Trucha Marrón.

     Cuando escuchamos hablar de grandes capturas hay un común denominador: Trucha Marrón. Y esto para muchos le da el aspecto equivocado de trucha fácil. Por sus características es casi siempre la que alcanza los mayores tamaños, lo que significa que tal vez una Trucha Marrón crezca más rápido que las demás o que por su tipo de alimentación y sus hábitos de vida sea la menos accesible para el pescador ocasional. Por supuesto que éste puede pescar a estos peces, pero debemos tener en cuenta que luego de unos años la Trucha Marrón es la que menos errores comete en el momento de alimentarse, por ello es posible encontrar muchas Truchas Marrones de mediano y gran porte, y a eso se debe su captura en forma ocasional.

     Lo cierto es que aquel que busque grandes marrones conociendo sus costumbres tendrá mayor éxito que aquel que dependa de su suerte. No voy a hablar de agresividad como causa de pique, porque a mi entender ésta depende del temperamento, y en función del comportamiento animal este es especialmente relativo.

     Las truchas poseen todos los sentidos adaptados al medio líquido, los tienen muy desarrollados y perciben absolutamente todo lo que ocurre debajo de la superficie del agua con bastante presición. Con esto quiero decir que el olfato, el gusto, el oído, y la vista de la trucha están  excelentemente adaptados a cazar en el agua, todos sus músculos están ubicados desde su cabeza hasta su cola, órgano principal de propulsión, a lo largo del cuerpo centralizando casi toda su energía hacia la aleta caudal en el momento de nadar o atacar, finalizando en una boca bien adaptada, tremendamente sensible y efectiva.

     Además de todo esto la trucha cuenta con su quinto sentido: la línea lateral, una franja a cada lado del pez que abarca desde la cola hasta la cabeza con una red de nervios sensores que le permiten captar toda la baja frecuencia emitida por algún organismo debajo del agua, este y la visión son los dos sentidos más importantes para la trucha y la causa de que nuestro admirado pez sea para los demás organismos subacuáticos del río un depredador similar a lo que fue el Tiranosaurus Rex para aquellos pequeños dinosaurios herbívoros.

     No nos vamos a ir por el lado científico de los sentidos de la trucha, solo hay que saber que cuando ésta no puede guiarse por su vista para poder cazar, porque se enturbió el agua, o no hay luz, no va a dejar de comer. Solo dará prioridad a otros sentidos como el olfato, el tacto y el gusto. Aunque por lo general la trucha es un cazador visual, o sea que combina la visión con ese órgano sensitivo que es la línea lateral, relegando a segundo plano a los demás sentidos.

     Las Truchas Marrones son, como dijimos las mejores en esto, además de ser extremadamente sensibles y sustadizas, lo acompañan con una gran cautela al accionar. Quien haya tenido a una gran Trucha Marrón en su línea habrá notado que este pez es bastante distinto al luchar, es más astuto, más tranquilo, más sorpresivo, más estrategico. Si los animales tuvieran intelecto diríamos que es sumamente inteligente.

     Debido a la conformación del ojo, las truchas no se adaptan a cambios bruscos de intensidad de luz, por lo cual prefieren lugares en donde no haya gran luminosidad, las grandes truchas marrones prefieren momentos del día con escasa luz o día nublados. El viento suele ser un buen alidado del que va en busca de grandes marrones, porque rompe el espejo de agua, agita la superficie, encargándose de que nuestra presencia sea menos perceptible para la trucha. En los días nublados o de llovizna, en el alba o el crepúsculo, una gran trucha marrón surca el agua, atenta a todo, en busca de su alimento.

     Para capturar las grandes truchas marrones creo en la voz popular de "mosca grande, trucha grande", porque ellas basan su dieta en organismos de buen tamaño: peces, cangrejos, grandes ninfas, y en ocasiones llegan a atacar a ratones, ranas, peces de porte considerable, aves acuáticas, etc.. Mis moscas preferidas son los grandes streamers como Rabbits con cabeza muddler, de dubbing o woolhead, grandes Woolly Buggers, imitaciones de grandes sanguijuelas, bagres, cangrejos, pejerreyes, etc.. La mayoría lastradas en anzuelos número 2 ó 4 de pata larga (3x,4x, 6x, long shank), por lo general uso imitaciones en un nivel de atado impresionista por su textura y movimiento.

     También las busco en el 90% de las veces en lugares de buena profundidad, de corriente algo lenta, y mayormente en aguas chatas, sin grandes turbulencias y siempre en el fondo. Pero hay ocasiones que contrastan lo expuesto: he notado que en alguos momentos, las grandes truchas marrones presentan actividad a diferentes profundidades, incluso muy cerca de la superficie del agua cazando peces o subiendo a capturar ratones, ranas o grandes insectos. Como también hay ocasiones en donde se ven grandes marrones alimentándose selectivamente de pequeños organismos por lo que en esos momentos nos conviene ajustar nuestras moscas a la situación reinante.

     Pero no obstante esos son comportamientos que pueden observarse muy pocas veces en grandes marrones, y que están sujetas enteramente al ambiente y al alimento que este proporcione. Si me pidieran que elija una sola técnica para pescar grandes marrones sin duda me inclinaría por las ilustradas en los gráficos de abajo.

Técnica río arriba en sectores profundos.

1) Lance río arriba unos 15 ó 20 metros. 2) Deriva y profundización, aproximadamente 2 veces la longitud del lance. 3) Frenar la línea. 4) Recoger. Es importante mantener el máximo control posible de lalínea en la zona más oscura. Para ello es necesario lanzar sobre la línea de la corriente.

     Uso líneas de hundimiento muy rápido (4, 5, 6, DI5, DI7) si es posible del tipo shooting taper o floating sinking de 6 mts.- Mis preferidas para esta técnica son las Teeny 200, 300, 400 ó 500, con líderes que rara vez superan el metro y medio de longitud, tippets de diámetro 0X, 1X, 2X, incluso en ocasiones finales de 10 ó 8 libras.

     Cualquier mosca que imite un bagre, cangrejo, juvenil de trucha, sanguijuelas, etc., con movimientos lentos y naturales cerca del fondo podrá depararnos alguna de estas joyas de la naturaleza. Que una situación similar a la que se describe en el comienzo de la nota se repita durante el siglo que viene no lo podemos asegurar.

     Hace más de 25 años, cuando yo no había nacido todavía, en el Río Limay a las 5 de la tarde de un día nublado poco después de una gran lluvia, con el río turbio y un viento bastante fuerte mi padre prendió una Marrón de más de un metro de largo, que logró escapar luego de una extensa lucha metiéndose debajo de una gran roca que había en el agua a unos 20 mts. del lugar en donde estaba. Hace escasos días un par de amigos lograron ver en el mismo río un ejemplar similar desde lo alto de una barranca. Nosotros aún podemos caminar un río con la esperanza de llegar a tocar una de esas joyas. Y me gustaría que mi hijo pudiera escribir lo mismo. (R. M.).-

Capítulo 3.

Decálogo Técnico/Místico.

     1°) Son pocos los ríos en los que Ud. puede ver a la trucha y luego pescarla. Es esta una situación inigualable, pero la más difícil. Cuando Ud. vió a la trucha, es casi seguro que ella también lo vió a Ud.. Si no es así, efectúe los lanzamientos desde la posición más lejana posible y de forma que la mosca llegue siempre primero. Son buenos los momentos de poca luz.

     2°) Si está en un río donde no es posible verlas, la lectrura de aguas y su instinto harán el trabajo. Donde sienta o crea que puede estar, imagínela. Del tamaño que Ud. quiera. Y haga todo lo que crea conveniente para pescarla.

     3°) Jamás tire y recoja automáticamente esperando el pique. Este se busca en todo momento. Busque el placer de un buen lanzamiento, la satisfacción de una buena presentación, una corrección de línea en el momento justo, cambio de ritmo en la recolección de la línea y de esa forma estará mucho más cerca de lo que antes solía esperar.

     4°) Cuando Ud. pretende pescar una gran marrón, está detrás de kilos de experiencia. Nunca la subestime. Todos los recaudos que pueda tomar en relación a ruidos, sombras y reflejos dentro o fuera del agua van en favor de la efectividad. Recuerde que la mayoría de las veces que vió una trucha en el río, la vió huyendo de su presencia.

     5°) Una trucha, sin importar su tamaño, como de todo. Lo interesante está en lo que más le atrae. Yo recuerdo siempre unas palabras de Joe Brooks que dicen: "A la trucha grande le gusta la boca llena".

     6°) La mosca, por el solo hecho de estar en el agua puede pescar con su forma y movimiento. Pero si su vista sique su recorrido por la superficie, y su mente nada con ella, pesca más. Concéntrese.

     7°) Tres kilos de marrón en la corriente se sienten fuertes. Que eso no logre que Ud. se sienta débil. Si piensa en que se puede ir, lo más seguro es que se vaya. Use el grosor del tippet que lo haga sentir lo más seguro posible.

     8°) En tramos de río de agua lenta, el pez tiene más tiempo tanto para tomar la mosca como para soltarla. Ud. ha logrado engañar su vista, pero no su paladar. Es conveniente tener un buen control de la línea porque el menor toque puede ser la trucha más grande.

     9°) Trate siempre que una gran marrón sea su sueño y no una obsesión frustrante.

     10°) La trucha es un animal con instinto de conservación. Ud. es un ser inteligente con instinto de pescador. Use ese instinto para pescarla, y su inteligencia para decidir que hacer con ella. (J. P. G.).-