La Laguna Bombilla
(Tierra del Fuego)
Por Miguel Casalinuovo y Sandra Molina.
Ubicación
Partiendo de Ushuaia hacia el Norte por la ruta 3, y luego de alcanzar el punto mas alto del recorrido trepando la Cordillera de los Andes por el paso Garibaldi, se empieza a descender, teniendo como vista el lago Escondido en primer término, y allá al fondo, el inmenso lago Khami (Fagnano). Este último es uno de los lagos más grandes de Sudamérica (el sexto), y el más largo de la Argentina con sus 100 km. de longitud, compartidos con Chile. Sus aguas desembocan en el Seno Almirantazgo (Océano Pacífico) por medio del río Azopardo. Se asienta sobre la falla de Magallanes y su profundidad máxima no es conocida. Como se encuentra ubicado en sentido E-O, es casi continuamente azotado por los vientos, semejando un gran mar, mas que un lago.
Una vez traspuesto un destacamento policial que queda sobre la mano izquierda, a 2 Km. aproximadamente la ruta se pega al lago Escondido, cruzando el puente sobre el río Milna, que nace de este lago para desembocar en el Khami. Aquí existe un aserradero. Apenas pasadas las instalaciones sin salirse de la ruta aparece un desvío a la izquierda que tiene una tranquera. Aquí doblamos y nos internamos en el bosque. Este camino, que hasta hace poco era una huella, está siendo ensanchado ahora por la provincia para facilitar el acceso a tres sitios de pesca: La lagunas Margarita, Bombilla y Palacios.
Recorrer este tramo del camino no es difícil ahora, incluso está transitable todo el año, pero hay que tener precaución con los camiones madereros que pueden cruzarse con nosotros. El Bosque no deja ver mucho alrededor, si bien está raleado por la explotación que sufrió un tiempo atrás. Para no perderse hay que seguir la huella principal, si bien hay carteles toscos que suelen desaparecer. A poco de andar aparece la primera bifurcación importante. Una sigue derecho y termina en un aserradero y la otra dobla a la izquierda y casi inmediatamente sube. Esa es la que debemos seguir. Luego de andar varios km. vamos a ver por primera vez el lago Khami desde un sitio elevado, y el camino luego empieza a bajar hasta llegar a un arroyo donde hay un campamento del aserradero. Luego de trasponerlo cruzamos un puente precario que cruza el río Bombilla y a poco de andar se abre un camino secundario a la derecha que nos lleva hasta la laguna. Está marcado con un cartel, pero en caso de que así no sea, se reconoce porque el camino se ensancha un poco, formando algo parecido a una rotonda triangular. Este nuevo sendero baja con bastante pendiente y termina en un pequeño desplayado al lado del agua, donde incluso se puede botar una embarcación. Este año, abrieron un poco más la senda, que tuerce en este punto a la izquierda y recorre la costa de la laguna hasta su desembocadura en el lago, donde existe una casita de madera que a veces está ocupada por un puestero.
La laguna Bombilla se forma por el desagote del río Bombilla, que proviene de la Laguna Margarita, ubicada pocos km. río arriba. Y vuelca sus aguas en el Khami. No es muy grande, calculo unas 10 hectáreas. Casi todas sus costas tienen vegetación arbórea, quedando libres de la misma, solo una pequeña lengua de sedimento grueso que la separa del Lago. El paisaje es hermoso, a pesar de la basura que podemos ver en algunos lugares. Es que es un lugar muy concurrido no sólo por pescadores, sinó por familias enteras que acampan y hacen picnic. Mirando hacia el Norte, el Khami rizado por las olas, con su sonido a mar, y al fondo las montañas que caen a pico en la margen norte del lago. Hacia el sur, más montañas, esta vez muy cerca, e incluso un pequeño glaciar. Generalmente hay infinidad de aves acuáticas, como el wala, que a última hora, en el crepúsculo deja oír su lamento sobrecogedor, o el cauquén, que nada en pareja acompañado de 6 o 7 pichones, todo plumón y torpeza. Además, y entre otros animales, se ven pájaros carpinteros, cotorras, guanacos y también castores, ya que en una zona de la laguna hay una gran castorera. Si sabemos buscar en los alrededores vamos a encontrar también muchas flores, que si bien son maravillosas, también son humildes, y no se dejan ver sinó luego de buscarlas, como la topa-topa, o la palomita de la virgen, una orquídea. Ya más conspicuos, los senecios tapizan las costas con sus margaritones tan bellos como malolientes.
La Pesca
En la laguna pueden ser encontradas las tres especies de salmónidos que pueblan las aguas de Tierra del Fuego: Trucha Marrón, Trucha Arco Iris y Trucha de Arroyo. El promedio de peso varía con el avance de la temporada. A principios de la misma pueden salir peces de hasta 4 kg. o más. Lo usual es sacar truchas de 1,5 o 2 kg. La capturas más comunes son de marrones, siguéndole las fontinalis y las A. Iris.
Vamos a rodear completamente la laguna, describiendo los distintos lugares de pesca, partiendo desde el botadero, recorriéndola en sentido antihorario.
Una vez transpuesto el botadero, la costa se eleva unos 3 metros, y hay gran cantidad de vegetación acuática cerca de ella. Esta parte de la laguna no es recomendable para pescarla, al menos los fines de semana, o cuando hay mucha gente. Si seguimos caminando, atravesaremos un chorrillo y poco después llegaremos a un sitio donde la costa baja nuevamente y hay una zona de pastos amarillos en vez de bosque. Estamos en la desembocadura del río Bombilla. La pesca en esta área es distinta según estemos lanzando antes o después de transponer el río. En el pastizal, vamos a encontrarnos con un veril alejado unos 8 metros de la costa, y poca cantidad de plantas acuáticas. Es el primer sitio de pesca serio desde que empezamos a caminar. Una vez realizados los intentos en este ámbito debemos cruzar el río con cuidado, porque el barro puede jugarnos una mala pasada. No está de más intentar en el río, que en su boca tiene varios brazos, aunque pocas veces hay peces. Generalmente esto sucede al principio y al final de la temporada.
Una vez en esta zona nos vamos a encontrar con dos ámbitos distintos. Uno es la zona aluvial del río, hacia la izquierda. Aquí es difícil ubicar la mosca o cuchara, debido a la gran cantidad de vegetación sumergida. Se puede observar "brazos" bajo el agua, que son los sitios en que se debe tratar de colocar el engaño. Si bien es muy difícil intentarlo, es el sitio donde se encuentran las truchas mas grandes, reposando en el fondo en busca de alimento que le trae ese "minidelta". Si se dispone de flotadores, puede ser pescado desde afuera hacia la costa y eso es otro cantar. Yo nunca lo he hecho. Hacia la derecha sigue, una zona caracterizada por tener una faja angosta para caminar, de no más de 40 o 50 cm, con un cerro por detrás que simula un acantilado. Para mí, luego de la boca, es la mejor zona, puesto que hay gran cantidad y calidad de presas, pero sin los inconvenientes del anterior sitio ya descriptos. El veril no se encuentra muy lejos de la costa, a unos 15 metros, pero, debido a que es la continuación del cerro bajo el agua, no hay grandes posibilidades de acercarse vadeando, y tiene bastante pendiente. Es por eso que yo muchas veces lo pesco en diagonal, para facilitar el lanzado hacia atrás. Hasta aquí estuvimos en zona casi exclusiva de marrones.
Luego de recorrer todo el cerro aparece una playa de arena, que mira al oeste, por lo cual recibe el viento de frente, y en sus costas se acumulan las plantas acuáticas arrancadas del fondo. Nunca hay gente pescando esta zona. Sin embargo, he podido ver ejemplares de más de 60 cm, con el lomo fuera del agua, por lo cual es necesario empezar a lanzar desde lejos y casi sobre la línea de costa. Si lanzamos lejos y hacia adentro podemos encontrar algunas arco iris.
Siguiendo nuestro recorrido, volvemos a encontrar una zona de piedras. Es una lengua que separa el Khami de la laguna, de unos 50 m de ancho. Junto a la costa acechan alguna fontinalis realmente interesantes. Seguimos caminando, arena de nuevo y el lago pegado a nosotros a la derecha. En la laguna el veril está a 3 m de la costa, es una zona con gran cantidad de vegetación acuática. Aquí es posible obtener las tres especies. De pronto nos topamos con la desembocadura de la laguna al lago. Por su dinámica, el agua no fluye sólo en un sentido, sinó en dos. A veces el agua entra a la laguna y a veces sale, por oleadas, según las ondas que se generan en el lago. Si Ud. puede lanzar lejos, cada tiro en el lago es un pique seguro. Los que pescan con cucharita, suelen pasar por alto esta zona, sin embargo, a 50 o 60 m de la costa el agua hierve de truchas, generalmente fontinalis, que parecieran estar acardumadas.
Al vadear la boca entramos en una parte que es el que pesca el 90 % de la gente que viene a la laguna. Por lo tanto no es de mis preferidas. A esto hay que agregarle que desde el año pasado el camino corre a escasos 5 m del agua. Sin embargo puede darnos sus sorpresas, sobre todo los días de semana. En esta zona he pescado una marrón de 74 cm el primer día de la temporada del año 97. Trasponemos una casilla (ojo que a veces hay perros, generalmente atados, pero que asustan) y de nuevo la costa se eleva un poco hasta llegar a una gran castorera. De aquí en adelante las aguas son someras, pero llenas de actividad, especial para divertirse con secas y equipos livianos. Todo el mundo pasa por alto este sitio.
De aquí, caminamos un poco más y estamos en el punto de partida.
El equipo ideal para pescar en este ámbito es una caña para línea 5 o 6 de 9 pies, salvo en la boca al Khami, donde puede ser necesario un equipo más potente, debido a las distancias a alcanzar y el viento reinante. Las líneas más utilizadas son WF II o III, con líderes cortos (4 a 7 pies) para la pesca con streamers y ninfas cuando no se observa actividad en superficie, o para buscar "las grandes". A veces yo utilizo una línea de flote con un líder de 10 pies, sobre todo en el delta del río Bombilla. Nunca he visto pescar con mosca seca, y como no la practico no es mucho lo que puedo decir, salvo que no es poco común encontrar ejemplares cebándose en la superficie. La técnica de pesca no tiene muchos secretos, se trata de barrer toda la superficie, empezando por la costa, un lugar olvidado por muchos. Sólo después de haber probado allí, meterse al agua y seguir intentando más adentro. Otra opción que me ha dado buenos resultados es ubicarse en un sitio y lanzar a derecha e izquierda paralelo a la costa, barriendo así la línea de costa.
Con respecto a las moscas, a principio y a fin la temporada funcionan muy bien los engaños de color blanco o verde oliva, sobre todo al anochecer. Las ninfas pescan bien todo el tiempo. Yo uso pocas moscas, variando más los colores que los modelos. Mis moscas preferidas son las Wooly Bugger, las Montana y cualquier variante de Rubber Legs. Como la laguna esta llena de anfípodos, (y los estómagos de las truchas también), una mosca que los imite debería funcionar bien, aunque no lo he probado hasta ahora. También he podido comprobar que la velocidad de recuperación influye mucho en la pesca. Por lo tanto pruebe recoger a dos o tres ritmos distintos antes de cambiar de lugar. A veces se sorprenderá de los resultados.
Como último consejo, tenga cuidado, toda la laguna está llena de troncos sumergidos, por lo que sea cuidadoso al vadear, sobre todo al regresar de noche. Siempre mirando el fondo con la linterna prendida. Ningún río lo va a arrastrar en este caso, pero un chapuzón en Tierra del Fuego, generalmente no es gratis. Y si al caminar por el agua siente un chapuzón que lo baña, no salga a decir que vio la trucha mas grande de su vida. Son castores.
Ojalá le sirvan mis consejos, y un día Ud. pueda encontrase al atardecer con el agua hasta la cintura en la laguna. El viento acaba de calmarse y el agua se plancha. Casi no hay luz y el wala se queja desde su nido flotante. Ahí abajo, entre la vegetación, una marrón acaba de ver su mosca.